Todo comenzó cuando en primera instancia uno de los obreros perdió el conocimiento a causa de los gases tóxicos tras ingresar a una bomba de aguas residuales. Este hombre está vivo, pero su hijo y tres funcionarios ediles fallecieron.
Detrás de la tragedia de Oruro que deja dolor y luto en cuatro familias hay dos historia de solidaridad. Un joven que buscó salvar a su padre y murió y una mujer que rescató a dos personas que están internadas en un hospital.
Todo comenzó cuando en primera instancia uno de los trabajadores perdió el conocimiento a causa de los gases tóxicos.
La reacción fue inmediata y su hijo ingresó al lugar y lo rescató, pero él ya no pudo salir. Las otras tres personas intentaron ayudarlo, pero también perecieron.
El hecho sucedió en un pozo de seis metros de profundidad en la Estación de Bombeo de aguas residuales que la Alcaldía administra en la Urbanización Villa Bolívar, de la ciudad de Oruro.
La Fiscalía informó que en las entrevistas preliminares realizadas a los familiares y trabajadores del lugar, indicaron que las víctimas se encontraban cumpliendo su trabajo, cuando uno de ellos ingresó al pozo y perdió el conocimiento por inhalar gases concentrados.
Esta persona fue rescatada por el joven de 24 años quien luego perdió la vida. Ante esta situación las otras tres personas ingresaron al lugar para rescatarlo; sin embargo, en ese intento también perdieron el conocimiento y al final fallecieron.
Un “habilitado”
Rómulo Alconz, secretario general de la Alcaldía de Oruro, informó que solo un funcionario “estaba habilitado para hacer el trabajo dentro del pozo y los demás en cadena han caído por querer ayudar”.
La jornada laboral comenzó con la intención de cambiar una motobomba. Nadie se imaginó que al mediodía de este lunes llegaría la tragedia.
Fuente: Unitel