sábado, noviembre 23

Presidentes de Bolivia y Brasil concretarán acuerdos en fertilizantes y agroindustria en julio

BOLIVIA

En julio próximo, los presidentes de Bolivia, Luis Alberto Arce Catacora, y de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, prevén concretar acuerdos relacionados con fertilizantes y agroindustria, anunció Horacio Villegas Pardo, embajador de Bolivia en Brasil.

“El presidente Lula estaría en julio en Santa Cruz. Creo que es una oportunidad importante para concretar varios hitos contemplados en los memorándums de entendimiento firmados en enero pasado, sobre el desarrollo agropecuario y la industria de fertilizantes. Tenemos todas las condiciones para entregar al Brasil la urea que requiere”, indicó Villegas citado en un boletín de prensa institucional. 

De acuerdo con dicha información, el anuncio fue realizado durante la Primera Reunión Técnica de los Grupos de Trabajo en materia de Fertilizantes y Agropecuaria, para la implementación de los Memorándums de Entendimiento. El evento se desarrolló del 24 al 26 de abril de 2024 en la ciudad de Santa Cruz de la Sierra.

Las delegaciones de ambos países conformaron grupos de trabajo para avanzar en el desarrollo de proyectos conjuntos. En la oportunidad se abordaron temas referidos a potasio y litio, nitrogenados y gas, plan de fertilizantes, agropecuaria, biocombustibles, biotecnología y acuerdos comerciales. Asimismo, se integró a las mesas de trabajo a los sectores privado de Santa Cruz y del Beni, además del sector universitario a fin de vincular a los componentes principales de la sociedad, para un desarrollo efectivo de la industria.

“Brasil consume entre 12 y 14 millones de toneladas de urea, consume casi 18 millones de toneladas de KCL, consume entre 10 y 11 millones de toneladas de fosfato y tiene 230 millones de cabezas de ganado; por tanto, la necesidad alimenticia de esos bovinos se satisface con la sal proveniente de nuestros salares, a través de convenios comerciales de exportación. Tenemos experiencia en la producción de urea, con la planta de Bulo Bulo y tenemos la Planta Industrial de Cloruro de Potasio (KCL). En temas de infraestructura vial, trabajamos en la pavimentación del tramo San Matías–San Ignacio de Velasco”, manifestó Villegas.

De acuerdo con el embajador, los proyectos de fertilizantes Planta de Urea Tres Lagoas, Planta de Cuiabá (ambas en Brasil) y la segunda Planta de Amoniaco y Urea que se previsualiza en Puerto Quijarro (Bolivia), contribuirán a cubrir la demanda de urea en Brasil, sobre todo de sus estados Rondonia, Mato Grosso y Mato Grosso do Sul que son los mayores productores de agronegocio y que son cercanos a Bolivia.

 “Brasil demandará en el futuro muchos más fertilizantes para su producción. Se van a requerir aproximadamente seis plantas y eso solo para cubrir el 50% de la demanda brasileña”, expresó José Carlos Polidoro, asesor de la Secretaría Ejecutiva del Ministerio de Agricultura y Ganadería del Brasil.

La Embajada de Bolivia en Brasil coordinó la implementación de estos memorándums a través de un encuentro con instituciones públicas del Brasil liderada por el Ministerio de Agricultura y Ganadería. En la oportunidad se expuso sobre el potencial boliviano y las condiciones necesarias para perfilar una hoja de ruta de cooperación técnica entre ambos países.

“Esperamos lograr acuerdos para asegurar la cooperación técnica. La atracción de inversiones y el financiamiento externo es muy importante para desarrollar la industria de fertilizantes e insumos. En lo comercial, esperamos lograr acuerdos para facilitar el tránsito de mercancías tanto de productos terminados de consumo como de materias primas refinadas con valor agregado. El restablecimiento de relaciones bilaterales y la integración de ambos países depende de los acuerdos que se vayan a firmar en áreas de interés mutuo”, indicó Villegas.

Según el Embajador de Bolivia en Brasil, el país vecino es uno de los mayores productores de maíz, soya, algodón, azúcar y café. Ese escenario y los acuerdos a los que se arribe permitirán a Bolivia implementar proyectos estratégicos en los campos del desarrollo agropecuario y nuevos modelos de negocios agrícolas y agroindustriales. Además, se apunta al uso de la biotecnología para garantizar un mayor rendimiento en la producción agrícola.