El presidente Luis Arce condenó la violencia contra la sede del ente matriz de los trabajadores. Aseguró que el hecho vulnera los derechos sindicales.
El intento de toma violenta de la COB “no va a parar” la marcha en defensa de la democracia y la economía, enfatizó Juan Carlos Huarachi, ejecutivo de este ente matriz. Hoy, más de 107 sectores parten desde El Alto hasta el Legislativo en demanda de créditos y leyes sociales.
A horas de la gran marcha en defensa de la democracia y la economía convocada por la Central Obrera Boliviana (COB), un grupo de evistas ingresó, de forma violenta, la tarde de ayer a la sede de esta organización matriz de los trabajadores para intentar tomar las instalaciones.
“Ahora más que nunca la marcha no va a parar pese a los intentos de golpe. Nosotros pedimos un pliego petitorio justo, no estamos pidiendo pegas ni cargos, pero están tratando de politizar esta reivindicación”, dijo Huarachi.
El ejecutivo enfatizó en que luego de concluir la marcha tomarán la Asamblea Legislativa, porque consideran que los diputados y senadores, elegidos para velar por las necesidades del pueblo boliviano, no están cumpliendo con su trabajo. “No están trabajando y si no lo hacen, es mejor que se cierre la Asamblea”, dijo.
El presidente Luis Arce condenó la violencia con la que se actuó contra la sede de los trabajadores y consideró el hecho como una vulneración de los derechos sindicales.
Concentración
Hoy más de 107 organizaciones afiliadas a la COB partirán del Multifuncional de El Alto rumbo a la plaza Murillo, de La Paz, en demanda de la aprobación de créditos y contra los intentos de desestabilizar la democracia del país.
Fuente: AEP