El 2024 se verán los resultados de la política de industrialización con sustitución de importaciones, que incluye la construcción y operación de más de 150 industrias, de las que dos están en pleno funcionamiento y empezando a consolidar la economía de “base ancha”, informó la viceministra de Comunicación, Gabriela Alcón.
“Este 2024 vamos a empezar a mostrar lo que significa la industrialización con nuestras más de 150 plantas que se han mostrado, que se han instalado y que se ha proyectado; vamos a mostrar los resultados”, aseguró en declaraciones a la prensa en La Paz.
Hasta el momento fueron entregadas la planta NPK de producción de fertilizantes granulados, en Cochabamba, y la Planta Industrial de Carbonato de Litio, en el Complejo Industrial de Litio, en Llipi, al sudoeste del departamento de Potosí.
Diseñado y ejecutado en la gestión del presidente Luis Arce, la planta NPK fue inaugurada el 13 de octubre. Produce NPK, un fertilizante o abono que está formado por los macroelementos nitrógeno (N), fósforo (P) y potasio (K).
Para fabricar NPK, la Empresa Boliviana de Industrialización de Hidrocarburos (EBIH) obtendrá la materia prima de las empresas Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB), Yacimientos de Litio Bolivianos (YLB) y de las canteras de Cochabamba.
En el proyecto fueron invertidos Bs 63,7 millones. La factoría tiene capacidad de producción de unas 60.000 toneladas (t) por año de NPK y urea granulada de liberación lenta, dos de los fertilizantes más demandados en el mundo.
Con esta producción se cubrirá el 100% de la demanda de fertilizantes en el mercado nacional, por lo que se dejará de importar el insumo.
En tanto, la Planta Industrial de Carbonato de Litio fue inaugurada el 15 de diciembre. Se invirtió Bs 766,9 millones, con una capacidad de más de 15.000 toneladas (t) de producción al año.
“Hay muchas otras (plantas) que se van a ir mostrando” y “vamos a acelerar en ese sentido, la industrialización de la que les hemos hablado, la sustitución de importaciones que nos permita tener esa economía de base ancha. Se va a ir mostrando ya desde los primeros meses y ese es el objetivo que tenemos”, aseguró.
Se prevé que en el primer bimestre de 2024 empiecen a operar cuatro de las siete plantas que integran el Complejo Siderúrgico del Mutún. Con ello, se empezará a producir barras corrugadas de acero y alambrón.
En las siete plantas industriales: Concentración, Peletización, Reducción Directa de Hierro (DRI), Aceración, Laminación, Central Eléctrica y Auxiliares, se invierten $us 546 millones.
Además, el 21 de diciembre, el presidente de YPFB, Armin Dorgathen, informó que en el primer trimestre de 2024 entrará en producción la primera Planta de Biodiésel (Santa Cruz) y, posteriormente, la segunda planta (El Alto). Entre ambas se llegará a una sustitución de importaciones de diésel de 7%.
Alcón afirmó que se “pisará el acelerador” en todos estos trabajos, “porque el resultado de la industrialización, de la estabilidad económica y del proyecto que estamos planteando hacia nuestro bicentenario se va a empezar a enfocar desde los primeros días (de 2024) en el objetivo de mostrar esa economía de base ancha que nos permita tener sostenibilidad, valor agregado y todo lo que significa la Bolivia hacia el bicentenario”.