El sector distribuye 150 toneladas de flores hacia el oriente y occidente del país.
La producción de flores para la festividad de Todos Santos enfrenta una crisis sin precedentes en Cochabamba debido a los bloqueos de carreteras. Según informó Rolando Morales, presidente de la Cámara Agropecuaria de Cochabamba, ocho mil familias dedicadas a la floricultura podrían perder la inversión de seis meses de trabajo si los bloqueos persisten.
En una jornada marcada por la desesperación, los productores realizaron una marcha de protesta donde se vieron obligados a desechar parte de su producción ante la imposibilidad de transportarla.
Javier López, presidente de la Federación de Productores de Flores, solicitó públicamente un cuarto intermedio de cinco días en los bloqueos para poder transportar su producción y abastecer los mercados durante la celebración de Todos Santos, una de las fechas más importantes para el sector.
Los intentos por encontrar alternativas de transporte han resultado infructuosos. La opción del transporte aéreo a través de Boliviana de Aviación se descartó debido a limitaciones de capacidad de carga y costos operativos inviables para los productores.
El impacto económico trasciende la pérdida inmediata de la producción. Los floricultores advierten sobre posibles cierres de unidades productivas y dificultades para cumplir con sus obligaciones financieras, lo que podría generar un efecto dominó en la economía local.
La paralización del sector afecta a una cadena productiva que requirió siete meses de trabajo previo para abastecer la demanda de Todos Santos, una de las celebraciones más significativas en el calendario comercial de los floricultores bolivianos.